Pablo nos habla del crecimiento de la iglesia, advirtiendo que los corazones de los creyentes pueden ser reconquistados por la carne en gran medida. También nos explica que ganar almas es obra de Dios y debemos tener cuidado cómo construimos. Aquí es explican las aplicaciones; y se habla del caso de aquellos que perderán una recompensa, pero serán salvos “como por fuego”.