‘Hermanos, si alguno fuere sorprendido en alguna falta, vosotros que sois espirituales, restaurad al tal con espíritu de mansedumbre, considerándote a ti mismo, no sea que tú también seas tentado.’
‘Hermanos, si alguno fuere sorprendido en alguna falta, vosotros que sois espirituales, restaurad al tal con espíritu de mansedumbre, considerándote a ti mismo, no sea que tú también seas tentado.’